Bajar a las alcantarillas y analizar las aguas residuales para rastrear el virus de covid-19 es un método barato e idóneo para regiones como América Latina y el Caribe, según un informe del Banco Mundial.
Una de las soluciones frente a la pandemia, cuando arrecia la variante ómicron, altamente contagiosa, puede estar bajo nuestros pies.
La epidemiología basada en aguas residuales o WBE, por sus siglas en inglés, complementa los estudios clínicos y permite que las autoridades "cuenten con una herramienta amplia, sostenible, temprana y equitativa para mejorar las respuestas de salud pública", sostiene el Banco Mundial en un comunicado publicado este martes. Leer más